lunes, abril 02, 2012

Insomne del Norte

Espaciosa, y natural como las casas viejas
llenas de almas.

La noche, esta noche otoñal en Catamarca,
entrama puertas sin llaves, bocas cerradas
ya sin hay nadie en las calles,
ni en los valles cercanos que no se dejan ver
a través de la ventana abierta,
en los segundos avistados.

Ya no hay indicios del día anterior.

La numerología ha descontado el tiempo,
el clima, y las hojas marchitas
de un arbol al frente de mi casa.

Ya no hay palabras alumbreras con fuerza
que cambien los destinos desencadenados,
serán frutos nacidos con el día,
y desechos con la noche.

Habrá culpas, habrá aciertos,
pero no habrá testigos de lo que el tiempo
hace consigo mismo.

Es la noche que miro,
que pienso en la que él no está.

Ese que se ha ido con la estación climática
de años pasados,
es el siniestro recolector de recuerdos
que eterniza lo que no tengo,
ni supe, ni olvidaré.

Es mi noche espaciosa de brisa acondicionadora
que quiere pero no lo dice.

Ya amanace,
el sueño predictor hace tregua con la realidad
y marea la decisiva acción.

Nadie dijo nada, y aun así cada vez menos palabra.
Respiro, es hora de dormitar.
En Presente nadie espera.
El poder es del que calló.
Así se fue. Poderoso.

"Insomne del Norte" Julieta Morais, 2012.

-

 
HAY COSAS MÁS GRANDES QUE YO, COMO LAS QUE IMAGINO, Y HAY COSAS MÁS PEQUEÑAS QUE YO, COMO LAS QUE SÉ. TAN SÓLO YO, LORENA, TAN SÓLO UN ABISMO MÁS...